En el último número de Vogue Francia aparecen niñas de seis años ataviadas y retratadas como putas de lujo.
Aquí están todas las imágenes del editorial de moda de la revista, presentado bajo el nada equívoco titular Cadeaux (regalos).
La idea es del diseñador estadounidense Tom Ford, seudo director de cine, gay a capa y espada de los de «no me tosas que soy maricón y tú una basura hetero» y diletante sin vergüenza.
Secunda la exhibición de niñitas ataviadas como busconas la directora de la revista, Carine Roitfeld, que empezó como modelo infantil y también fue retratada entonces en poses sugerentes por el más rápido pistolero del filtro fotográfico digital, Mario Testino (del que exhiben estos días fotos disfrazadas de Alta Cultura en el museo de la baronesa Thyssen en Madrid)
Toda esta gentecilla (Ford, Roitfield, Testino) forma parte de la intelligentsia de la pinza y el maquillaje.
No hay constancia de que sean pedófilos. Tampoco hace falta para deducir que son unos canallas.
«No hay constancia de que sean pedófilos. Tampoco hace falta para deducir que son unos canallas.»
¡ Qué certero !
who the hell are these kids’ parents?!
what were they thinking when they signed the permission slip!?
heartbreaking….
that’s one of the questions, may be ‘the question’
Pobres niñas. Putos canallas.