Bye, bye, Chuck, Estaba preocupado por las consecuencias de no poder reintegrarte la deuda. Me amedrentaban tu mal humor proverbial, tus ganas de venganza, tu creencia certera de que te hurtaban el trono, tu demanda contra el inocente Brian Wilson por aquel plagio que solo era reverencia, la temible enseña de tu bandera: «el...
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