De estar vivo, de no haber transitado por el camino de la tristeza, el mejor cantante de la historia cumpliría hoy 60 años. Pocos días después de la muerte, tan temprana y negra, de Camarón de la Isla (1950-1992), recibí una pegatina de un amigo malagueño que le veneraba. Era un gran papel blanco...
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