Ciudad embarrancada, atrapada por desniveles y abrazada a colinas, San Francisco hace gala de escaleras como una damita de relicarios. Las Filbert Steps (31% de inclinación, las más extremas del hemisferio occidental) son hermosas: bajan, atrevidas, por una pendiente vertiginosa y dan acceso a equilibradas casas de madera aisladas, sometidas con placentera desidia a...
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