Predicadores atacados por cebras, cañas de pescar y puentes. Barrios peligrosos y parques. Niños, siempre niños. Ocho fotos de San Francisco con mi Holga. Reveladas en casa, como debe ser.
Tags: 120 mm, blanco y negro, film, Holga, Kodak Tri-X, medio formato
This entry was posted on 11/08/2013 at 00:11 and is filed under mi ceguera, novedades. You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed.
Siempre hago balanco y negro el efecto que consigues con la holga es genial…me compro una.
Te lo pasarás bien con ella, ya verás. Gracias.